¡Pillados!
Salimos del restaurante pasada la medianoche. Ya no había gente por las calles cuando vivimos una experiencia totalmente inesperada…
Acabábamos de salir del aparcamiento en nuestra furgoneta alquilada cuando un coche de policía nos dio luces y ordenó detener. Paramos el coche y el conductor bajó la ventanilla antes de poner ambas manos sobre el volante (lección aprendida de tantas y tantas series americanas: en un país donde cualquiera puede tener un arma hay que evitar movimientos que pueda resultar sospechosos). Segundos después un policía nos iba iluminando las caras uno a uno con una linterna mientras en la otra mano sostenía firmemente una pistola. Dijo algo ininteligible para nosotros y ante la cara de estupor de todos preguntó quien hablaba inglés. Nadie. Os parecerá increíble pero en aquel momento ninguno de los 6 estaba por practicar nuestro inglés chapucero con un hombre armado. Así que no respondimos y nos quedamos como idiotas mirando para la cegadora luz de la linterna. Al policía no le convenció la ausencia de respuesta y volvió a preguntar. Nadie.
El ambiente de la furgoneta era un cuadro: el conductor con las manos al volante, el copiloto con el GPS en las manos (ni siquiera le había dado tiempo a colocarlo) y los de atrás como 4 momias impasibles. Afortunadamente el policía no nos creyó y decidió cambiar de estrategia. A partir de ahí comenzó un dialogo de palabras sueltas con las que le dimos a entender que éramos de Spain, la furgoneta era rented (alquilada),estábamos haciendo tourism (turismo) y nos dirigíamos al motel. Esto último señalado con el dedo en el GPS. También pidió el permiso de conducir del conductor que se lo pasó con movimientos lentos e indicando previamente con gestos lo que iba a hacer. La mano del policía sobre la pistola imponía mucho.
Tras comprobar la documentación nos abandonó un momento para ir a consultar algo a su compañero, que permanecía en el coche detrás de nosotros. Suponemos que estaban comprobando la matrícula de la furgoneta. Estábamos nerviosos, porque aunque todo parecía ir bien no entendíamos que podía pasar y la manera de pararnos no fue la de un control de carretera ordinario. Algo debíamos haber hecho mal y no sabíamos el que. Cuando volvió el policía con su linterna parecía satisfecho y nos hizo una última pregunta ¿de dónde veníamos? Del Parking …La respuesta le gustó y dijo la palabra clave LIGHTS (luces)
Ibamos sin luces! No nos habíamos dado cuenta porque el aparcamiento estaba iluminado y acabábamos de salir a la carretera cuando nos pararon. Sorpredentemente después de toda la historia ni siquiera nos multó y pudimos respirar tranquilos. Unos minutos después de llegar al motel vimos pasar el mismo coche de policía. Nos tenían controlados…
NOTA: Después de esta experiencia os puedo asegurar que el carnet de conducir de España es válido en USA.No hace falta sacar el Internacional.
Capítulo 29: Navegando en busca de ballenas
© O ViaxaDoiro,2010
Comentarios anteriores a marzo de 2014
Miércoles, 10 de noviembre de 2010 | 18:03
Menuda aventura con la policía, a mi me pasó algo parecido, pero por exceso de velocidad pasamos por delante de un radar camuflado y nos persiguieron, hasta que paramos, el policía fue muy amable y nosotros nos hicimos los despistados, ibamos como en cualquier autovía de España, pero allí como comprobarías hay que ir un poco más lento y claro, era complicado acostumbrarse, nos dijo que fueramos más despacio y seguimos adelante, ni nos pidió el carné internacional.Lo que te ha pasado con las luces le paso a mi amigo saliendo del cine xDDDSaludos !!
Miércoles, 10 de noviembre de 2010 | 20:07
Genial aportación!!! otra cazada!!! Menos mal que no nos pasó en Los Angeles, que ahí los policías no son tan amables… Es curioso,pero al final estas anécdotas se acaban convirtiendo en grandes recuerdos (ahora, hasta me alegro de que nos pararan…) Si a alguno más le han parado, que lo comente que inaguramos el club de los BAD BOYS (con la música de Cops de fondo)
Viaxadoiro 