Turquía 2004.5º día de viaje
Pronto una pequeña tienda de artesanía repleta de vasijas de bronce, telas de colores y marionetas llamó nuestra atención. No pudimos resistirnos a entrar y el mercarder pidió a su pupilo, un niño de unos 8 años que fuese a buscar te para todos. Sin saberlo, habíamos entrado en Karagoz Antique Shop (Sección Carsi del Bazar Cubierto de Bursa) y nuestro amable anfitrión era ni más ni menos que Mr Rafet Çelikkol, una de las personas que más ha hecho por recuperar la tradición del teatro de sombras turco y que tiene una maravillosa colección de marionetas artesanales en su pequeña tienda.
El teatro de sombras turco y sus personajes más representativos nacieron en la ciudad de Bursa a mediados del S.XIV.
Cuenta la tradición que durante la construcción de la Gran Mezquita, que congregó a los mejores maestros de obras del imperio, se hizo popular un joven capataz llamado Karagöz que pasaba más horas representando hilarantes parodias, algunas bastante subidas de tono, que dándole al pico y la pala. Sus cualidades para la comedia eran tales que el resto de compañeros de faena abandonaban sus quehaceres para seguir sus representaciones en las que solía acompañarle otro trabajador llamado Hacidav. Las andanzas del dúo cómico llegaron a oídos del Gran Sultán Yildirim Beyazit, mecenas de la obra. El sultán, que no destacaba por su sentido del humor, sino por su ardor guerrero fraguado en el campo de batalla contra los primeros cruzados, ordenó de inmediato la ejecución de ambos jóvenes por impedir el correcto avance de las obras. Karagöz y Hacidav no volvieron a contar más chistes pero fue tal el cariño y aprecio que les tenían sus compañeros que decidieron reproducir sus siluetas en piel de camello y seguir representando sus comedias como homenaje. Así nació el teatro de sombras turco también conocido simplemente como Karagöz.
Mr Rafet quiso hacernos una demostración de cómo funcionaba y tras apagar las luces de la tienda se encaramó en un taburete para encender un pequeño escenario de piel de camello muy fina con telones de colores a los lados. Se iluminaba por detrás trasluciendo las sombras de sus dos personajes: En su historia Karagöv era del Barca y Hacidav del Madrid y discutían sobre qué equipo era mejor. Era un guión sencillo pero hilarante donde mezclaba nombres de jugadores con expresiones de aprobación. Nos ganó a todos y en media hora consiguió que quisiéramos llevarnos a Karagöz y Hacidav a casa.
Las marionetas son realmente preciosas. Están hechas de piel de camello y pintadas en vivos colores que se intensifican al pasar la luz. Tienen sencillas articulaciones de cuerda en hombros y cintura que permiten el movimiento. Las hay de varios tamaños, nosotros compramos 2 pequeñas y es un recuerdo del viaje al que tengo mucho cariño (no recuerdo el precio, pero no son caras)
Tras nuestra fantástica experiencia en el bazar nos reunimos con el resto del grupo para visitar la Mezquita. En su origen formaba parte de un complejo sanitario, educativo y religioso, pero tras el terremoto de 1855 solo quedan la mezquita, la tumba del sultán, un madrasa, el hamam y el hospital. Nosotros solo visitamos la mezquita. Tras el oficio religioso había quedado un olor a multitud bastante desagradable, lo que unido al calor que nos provocaba ir cubiertas de la cabeza a los pies hizo que acortáramos bastante la visita. En el interior destacan las altas y numerosas columnas, las ricas caligrafías que invaden todo y el púlpito de madera tallada.
Tras la mezquita visitamos la Tumba Verde llamada así por estar revestida de azulejos de ese color y que no llamó demasiado nuestra atención.
Ese día el guía nos había reservado mesa en un restaurante bastante elegante donde nos sirvieron Kebab y ensalada en bonitos platos de cerámica pintada a mano y donde una vez más nos sorprendieron con la calidad de la comida turca. Está todo buenísimo y la saboreamos con gusto mientras pensábamos en nuestro siguiente destino: nos vamos a Estambul!
Circuito por Turquía: Llegada a Estambul
texto y fotografías © O ViaxaDoiro,2011
Lunes, 13 de junio de 2011 | 18:15
Lunes, 13 de junio de 2011 | 18:50